¡Qué perra les ha cogido con los niños!
Los infantes de hoy son la generación más aficionada a los videojuegos y a las redes sociales (sí, ya sé, antes no había) y resulta que se van a traumatizar por no salir a la calle.
Las consecuencias de no poder jugar a las canicas en las aceras, deben ser devastadoras para el desarrollo psicológico de los niños. Supongo que debe de haber un equilibrio entre la Play Station y la peonza.
A los setentas los enviaba yo. Una temporada en la Transición y se dejaban de bobadas.
