He terminado los primeros planos del Castillo de Chulilla, cuyas medidas estuve tomando este pasado mes de octubre. Yo solo, armado con una cinta métrica he levantado este plano, bajo un sol abrasador, soportando el ataque de insectos y cayéndome por cuantos terraplenes me iba encontrando. No he tenido más ayuda que la fe inquebrantable es mí mismo, ya que mi demanda de información a las autoridades de la localidad no recibió más que silencio administrativo. He aquí el fruto de mi esfuerzo:
No pretendía hacer un proyecto arquitectónico sino más bien una representación aproximada como base para construir un modelo en 3D.
Ya sé que no pega con el tono general del blog, pero bueno, me siento orgulloso y lo publico, que para eso es mi blog.
Entradas relacionadas.
Cuánto talento desaprovechado, David!En fin, es el signo de nuestros tiempos ;(
¡Favor que usted me hace!